El Reglamento de Calidad del Aire y Sostenibilidad, también conocido como ordenanza 4/2021, es una normativa que busca promover prácticas y tecnologías sostenibles para la protección del medio ambiente. En este sentido, se están desarrollando diferentes proyectos e iniciativas que buscan fomentar la bioenergía, el hidrógeno verde, la energía solar y eólica, entre otras alternativas amigables con el entorno.
Bioenergía
La bioenergía, proveniente de fuentes renovables como biomasa, residuos orgánicos o biocombustibles, es una de las principales fuentes de energía sostenible en el marco del Reglamento de Calidad del Aire y Sostenibilidad. Su desarrollo y uso adecuado contribuyen a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y a disminuir la dependencia de combustibles fósiles.
Aowinde, el proyecto que quiere desatascar la eólica marina en Galicia y Norte de Portugal
El impulso de proyectos como Aowinde es fundamental para promover la generación de energía eólica marina, una fuente limpia y renovable que puede contribuir significativamente a la reducción de emisiones y a la sostenibilidad energética en la región.
La UPC inaugura un laboratorio y una planta piloto para avanzar en la investigación del hidrógeno verde
El desarrollo de tecnologías para la producción y almacenamiento de hidrógeno verde es crucial en el marco de la transición hacia una economía sostenible. La investigación y la implementación de estas tecnologías no solo contribuirán a la calidad del aire, sino que también abrirán nuevas posibilidades en el ámbito energético.
Madrid Futuro Solar completa el proceso de un autoconsumo en menos de tres meses
La apuesta por el autoconsumo de energía solar es una de las alternativas más prometedoras para reducir la huella ecológica y avanzar hacia un modelo energético más sostenible. Proyectos como Madrid Futuro Solar son un ejemplo de cómo es posible impulsar la generación distribuida y la eficiencia energética.
En resumen, el Reglamento de Calidad del Aire y Sostenibilidad promueve el uso de energías renovables y tecnologías limpias para reducir la contaminación y fomentar la sostenibilidad en el ámbito energético. El impulso de proyectos e iniciativas en torno a la bioenergía, la energía solar, eólica y el hidrógeno verde son fundamentales para alcanzar estos objetivos.